1- Ve la televisión en español. Aunque no entiendas todo, estarás entrenando tu oído.
2- Escucha conversaciones en una cafetería o por la calle. ¡Marujea!
3- Habla (o intenta hablar) con vecinos. Si ven que te estás esforzando en aprender su idioma son muy amables.
4- Si vives en una zona donde hay mucha gente de tu país de origen, oblígales a hablar también en español.
5- ¡Lee en español! No solamente libros adaptados para el aprendizaje. Cualquier libro, publicidad del Carrefour, panfletos electorales, revistas, periódicos, blogs en internet, plataformas de series… Hoy en día hay infinidad de materiales para el aprendizaje online, ¡úsalos!
6- Cámbiate la configuración de móvil a español. Todo un desafío, os lo aseguro.
7- Habla, habla y habla, desde el minuto uno, con nativos o estudiantes como tú, aunque sea mal. Las conversaciones de tu “día a día” deben ser lo más fluidas posibles. Si te paras a pensar en la gramática correcta, ese silencio que se crea, termina con el diálogo. La corrección al hablar, la irás introduciendo con el tiempo sin darte cuenta.